Erik Casas ha sido un tenista que ha tenido logros históricos que no han sido superados por connacionales. Tan es así que conquistó el Banana Bowlen 1992, esta justa es la de mayor tradición en Sudamérica y llegó a ser la más importante.
Fue monarca del nacional de dobles con Enrique Abaroa siendo juvenil y llego a cuartos de final del Abierto Mexicano con Raúl Ramírez estando semi-retirado. Compitió en el circuito profesional.
Casas fue presidente de asociación, director del Nacional Abierto y tuvo su academia.