Han pasado 8 años de que el veracruzano Cesar “El Tiburón” Ramírez levantara el trofeo para coronarse como campeón del Torneo Grado “A” de México, conocido como Copa Casablanca, al dejar en la antesala al ruso Alexey Grigorov.
“Ahorita que lo comentas, es bonito acordarse, la verdad como mexicano ganar en tu tierra tiene doble de valor y ahorita estoy contento de venir y ver que hay varios nacionales que están en el torneo y pueden soñar con devolverle el título a este país”, dijo el ex campeón juvenil.
La mayoría de los locales tienen ese plus de jugar en casa y con el público a favor y eso es algo que todos deben aprovechar. Para Ramírez jugar en tu propio país “es una sensación única, son las cosas por las cuales eres atleta, y aparte se siente mucho más al ser mexicano, fue fundamental el apoyo con una atmósfera increíble y ojala que se repita más veces y que la gente de presencia desde las primeras rondas y no sólo en la final apoyando a los mexicanos porque estoy seguro que eso los ayuda a llegar a estancias finales”, recalcó el veracruzano.
Históricamente, México ha sido potencia mundial en juveniles, siempre hemos tenido top ten y campeones de Grand Slam.
Actualmente -dijo-, el nivel en menores de 18 años ha venido subiendo, cada vez se vuelve más competitivo, la velocidad sigue aumentando y la bola cada vez es más rápida entonces eso hace que el nivel juvenil sea más complicado. “Creo que el tenis y todos los deportes están evolucionando y lo ves hoy en día, muchos juveniles están jugando ya profesional”, comentó Cesar Ramírez.
Para finalizar, el veracruzano, les dejó unas palabras a todos los mexicanos que vienen con el sueño de ser campeones en tierras aztecas. ”Pues que se la crean sólo eso, porque a veces ves venir sembrados top ten y eso siempre apantalla un poco, pero creo que si hay un lugar en el que le pueden competir al número uno del mundo es aquí, así que hay que invitarlos a eso, a que luchen punto por punto y cuando menos te das cuenta ya estás en la final”, concluyó “El Tibu”.