Cuando se hizo el anuncio del J30 del Club Campestre se llegó pensar que sería un camino fácil para los tenistas nacionales, pero la realidad indico que resulto un torneo muy duro con exponentes sin ranking, que en cancha mostraron mucha calidad.
Guillermo Narcio fue el mexicano que avanzó más, pues cayó en la semifinal y no obstante que este chamaco hizo un gran papel, el resto de los nacionales quedó a deber porque no se aprovechó la condición de local.

