Una nipona de color que responde al nombre de Naomi Osaka se llevó por segunda vez el cetro del US OPN y demostró el por qué ha llegado a ser en tiempos pasados la número uno del mundo.
Naomi le cortó la racha a la bielorrusa Victoria Azarenka al son de 1-6, 6-3 y 6-3 mostrando más físico y sobre todo un excelente manejo de la cancha.
La sangre de Naomi es haitiana y por eso su padre Leonard Francois debe sentirse orgulloso, dado que no fue aceptado por la familia Osaka.
Naomi se formó en Estados Unidos, pero defiende los colores de Japón y eso nadie lo pudo evitar. Dado La hermana es muy conocida en Irapuato, dado que ha participado en el Guanajuato Open, un mundo singular el del tenis que relaciona a pobladores de la ciudad de la fresa con una familia sui generis.