El salvadoreño Marcelo Arévalo dejó el corazón en la cancha, pero los calambres impidieron que pudiera concluir la batalla ante el español Adrián Menéndez Maceira y perdió con score de 6-1, 6-7 (7), 4-3 y retiro, en la semifinal del San Luis Open.
Arévalo, tuvo muchos chances para cerrar el segundo set, pero a base de garra lo hizo al lanzarse una palomita al estilo Boris Becker que tomo de sorpresa al español.
La gente le dio el apoyo total al salvadoreño, quien a pesar de la derrota salió como torero en una tarde triunfal.