Por Alejandro Álvarez Zenith
El tenista bajacaliforniano Lucas Gómez es un tenista que está luchando para mejorar su posición en el circuito profesional, en consecuencia merece todo nuestro respeto.
RESPUESTA DEPORTIVA, le dará seguimiento a sus actuaciones porque es el número dos del país en este momento y esperamos que logre sus objetivos.
Recuerdo perfectamente su actuación en el Abierto Juvenil Mexicano porque ha sido el único mexicano que ha llegado a la ronda semifinal. Al año siguiente ganó el torneo de Halle en Alemania y ratificó su hegemonía en México conquistando la Copa Jiticc.
Tuve la fortuna de estar muy cerca del que fue presidente de la Federación Mexicana de Tenis Gastón Villegas y antes de ganar las elecciones se pensó en la creación de un fideicomiso que tendría la misión de apoyar a los tenistas mexicanos.
Dentro de ese fideicomiso destaco la presencia de Carlos Gómez y Gómez, quien fue el hombre que aportó más recursos para el nacimiento del Abierto Mexicano de Tenis en 1993 a través de su banco que era conocido como BANCO MEXICANO.
Gastón tomó la decisión de incluir a su equipo a Fernando Segal de origen argentino y en consecuencia se involucró en el fideicomiso y como consecuencia al ser director del PNT tuvo cercanía con Lucas.
Segal tiene muchos detractores en el medio tenístico nacional, empero, no es correcto que se mezcle la cerrera de Lucas con lo bueno o malo que hizo el oriundo de Argentina en la FMT. El jugador merece respeto porque está haciendo su lucha y en RESPUESTA DEPORTIVA le deseamos lo mejor.