El actor mexicano Diego Klein cuando entra a la cancha de tenis sorprende a propios y extraños porque además de ser zurdo natural es un jugador excelente que se da el lujo de exhibir un tenis moderno y extremadamente efectivo.
Diego como ser humano es sencillo y se puede decir que es buena gente porque se maneja con bajo perfil y se da tiempo para saludar a quienes lo ubican como actor.
Para el tenis el hecho de que un personaje en crecimiento como Diego compita es un valor agregado. Hoy se puede decir que se une a varios actores que en el tenis ven a su deporte favorito con la ventaja de que puede ser considerado dentro de los mejores de todos los tiempos porque en otras épocas otras figuras también lucieron.