El tema de jugadores en México en base a un ranking ATP se reduce a nueve, cuyos lugares varían del casillero 408 al 1742 en lo que se refiere al singles. En dobles se cuenta con un crack que esta de 12 del mundo y que responde al nombre de Santiago González.
También se ubica a Miguel Ángel Reyes Varela, quien es el 67 y no se puede menospreciar a Hans Hach porque aun siendo el 134 de la ATP es extraordinario doblista.
Para todos ellos nuestro respeto, a sabiendas de que su formación ha sido un esfuerzo familiar y en algunos casos entrenadores se las han ingeniado para reclutar jugadores y apoyarlos con entrenamiento a cambio de algunos beneficios. También se detecta a quienes consiguen patrocinios y nos ponemos de pie ante sus nobles gestos.
En el caso de la Copa Davis tenemos claro que actualmente hay cantidades asignadas a los jugadores que se les deben entregar de forma íntegra con reglas claras y sobre todo transparencia para que no se den los dimes y diretes.
Respetamos su derecho a jugar o no dependiendo de sus compromisos. Pero si los mejores no aceptan lo justo es que a los sustitutos no se les pague menos porque ahí se da la posibilidad de que la ganancia sea para los pescadores.
Estamos completamente de acuerdo con aquellos que quieren saber que se hace con las ganancias que se dan en Copa Davis. Suponemos que las ganancias se otorgan a juveniles, pero esa vigilancia le corresponde al consejo directivo de la FMT.
También es importante que los grandes torneos profesionales definan una política de apoyo para el tenista mexicano en base a un ranking. Y que los de nivel medio que van desde ITF de 15 mil a los challengers concedan todos los wild cards a los mexicanos que están en la batalla porque a final de cuentas muchos de estos torneos reciben apoyo gubernamental.
Completamente de acuerdo en apoyar al tenista mexicano de forma global y analizar el mapa completo porque si solo se hace en Copa Davis está bien pero se abarca muy poco.
Un capitán de Copa Davis debe gestionar las mejores condiciones para los jugadores en Copa Davis y debe levantar la voz ante los directores de los torneos para que las ganancias que se pueden obtener de un wild card le sumen al jugador MEXICANO.
Es tan fácil hacer un diagnóstico de la situación por la que atraviesa el tenis mexicano, pues en el caso federado ratificamos que es importante la transparencia y si es posible conceder todas las ganancias a los jugadores a menos de que se diga que se hace con el dinero. Completamente de acuerdo.
También aquellos torneos que gozan de un apoyo gubernamental tienen una responsabilidad, pero en ese terreno nadie levanta la voz. Y una verdad que nadie puede ocultar es que de momento un tenista mexicano no tiene el nivel para ganar los ATP y WTA que existen en el calendario mexicano y ahí se da el justificante para que se los den a los extranjeros.
Fuera máscaras y apoyemos de verdad al tenista mexicano con hechos.