La verdad es que es una pena y una triste noticia la muerte de Joaquín, poseedor de un gran estilo y una técnica muy completa, misma que deberíamos trasmitir a los jóvenes de hoy, acompañado de un desarrollo más actual, de la misma forma en que E. Edberg, ha logrado el excelente regreso de Roger Federer al no. dos del ranking ATP, a sus 33 años de edad y haciéndolo ir a la red con mayor frecuencia, para cerrar los puntos más rápido y no seguir copiando modelos Argentinos o Españoles que difícilmente se adaptan con buenos resultados al tenista Mexicano.
En fin espero que Joaquín descanse en paz y nunca lo olvidemos los logros obtenidos en el tenis de nuestro país.
Saludos y Feliz Año.