Víctor R. García Montes, quien fue parte de la asociación de tenis de Puebla por años, emigró a Guadalajara, tierra de bellas mujeres, donde se siente más feliz que nunca.
Juega tenis todos los días en el Club Los Pinos y tiene muchos amigos. La grilla del tenis quedó en una amaga pesadilla, es decir, en el olvido.