La que fue finalista de Wimbledon, Sabine Lisicki, estuvo entrenando en la cancha dos de YMCA MALLORCA ante el asombro de muchos aficionados que se le acercaron para tomarse la foto del recuerdo.
La germana 12 del mundo en su mejor momento fue atenta, pero a la vez mostró una sencillez poco vista porque al termino de su practica como cualquiera pidió su taxi y se fue a descansar dando ejemplo de la humildad que se debe mostrar.
La finalista de Wimbledon busca regresar a la elite y por eso se encuentra en la Ciudad de México.