Los maratonistas del club Hacienda San Javier de la ciudad de Guadalajara, Jalisco, lograron su objetivo de completar la distancia de 42K en la Maratón de Chicago el pasado Domingo 11 de Octubre.
Cerca de 50 atletas se dirigieron hacia la ciudad de los Vientos totalmente preparados tanto física como mentalmente para superar la Justa Atlética, aunque para llegar hasta ese día tuvieron que pasar muchos sacrificios en los meses de ardua preparación.
Todo comenzó a finales de Diciembre del año anterior cuando una de las mejores maratonistas, Lupita Rentería, iniciaría la convocatoria a quienes desearan pertenecer al equipo, y casi de inmediato empezaron la preparación bajo el mando de los entrenadores Enrique Sánchez y Jesús Aguilar, sin faltar del Coach del equipo, el maratonista Jorge Manuel González, que dicho sea de paso, ha participado en un sinfín de maratones, éste último cronometrando un tiempo de 3:30, y sin haber entrenado!
A partir del mes de febrero se iniciaron los entrenamientos de repeticiones, velocidad y resistencia, comenzando los sacrificios para vencer lesiones, enfermedades y desvelos cuando había que hacer distancias que iniciaron desde los 10K hasta los 35K como parte de la rutina, pero no obstante superaron todos esos retos y a principios de Octubre culminaron la primera prueba que fue de entrenamiento.
El grupo partió hacia la ciudad de Chicago, Illinois dos días antes de la Maratón para recoger los paquetes que incluían el número de corredor así como la playera conmemorativa, todos ellos con la ilusión de completar la prueba, aunque muchos de ellos ya llevaban una larga trayectoria corriendo maratones, para otros fue su debut, unos realizando la gran hazaña de cronometrar hasta 3:30, y otros más terminando poco más de las 5 horas, lo importante era completarlo, llegar bien y sin lesiones.
Lo más maravilloso fue la enseñanza que dejó esta aventura, el apoyo que unos y otros se brindaban desde las largas distancias de entrenamiento los fines de semana, el consolidar una amistad entre todos, el apoyo incondicional que cada uno brindaba hacia los demás, y el pensar que nada es difícil cuando un deportista logra lo que se propone sin importar las circunstancias adversas.