Dentro del mundo de los negocios las vinculaciones son fundamentales para que se puedan llevar a cabo proyectos de todo tipo, incluyendo los deportivos.
Dentro de este entorno las traiciones, la voracidad y la malicia son pan de cada día y es donde surge un dicho: Tu lo metes y él te saca. Esto sucede cuando vinculas a las personas que están en la posición adecuada para darle vida al proyecto, pero que antes de una vinculación carecieron de los puentes y herramientas para llevarlos a cabo.
Cuando analizas el historial de los torneos que logran sobrevivir y que se manejan con fuertes intereses económicos se dan mucho las puñaladas traperas a através del hurto de ideas y ataques de todo tipo.
La lista que se ve en el operar de las traiciones es larga porque depende de la maldad de cada ejecutor. De tal forma que si a ti se te da la vinculación o te acercas a personas que te apoyarán en tu desempeño, pues pon tus barbas a remojar.
Si tu eres creativo y estás por debajo de las cabezas no serás invitado al corte del pastel. Lo que hemos visto en el mundo del tenis mexicano tiene a la traición muy cerca del altar de lo que muchos llaman madre muerte, pues a final de cuentas son karmas negativos que tarde o temprano rebotan.
SI TE QUEDA EL SACO ERES: «TRAICIONERO»