El argentino Guillermo Coria durante su estancia en México compartió el pan y la pimienta en Chiapas con el que fue gobernador de Chiapas Pablo Salazar en el año 2003, siendo uno de los mejores cuatro del mundo.
Guillermo, ofreció una exhibición en la cancha del hotel Camino Real de Tuxtla Gutiérrez y en un principio dijo que solo estaría en unos minutos con las promesas chiapanecas, pero lo cierto fue que duro más de una hora porque al ser su vocación el tenis estaba fascinado en cancha.
Guillermo aprovechó la ocasión para convivir con sus padres y la verdad es que se la pasaron muy bien dentro y fuera de la cancha porque la afición respondió.