Dentro de un entorno de alta competencia, organización profesional y una afición entregada, el bello club Santa Anita inauguró su tercera cancha de Padel en un ambiente sui generis y con la bendición de un cura, cuyo sermón nos llevó a una reflexión que va más allá.
Todo esto al calor de un evento que puso en juego una bolsa de 100 mil pesos y que fue promovido por Carlos Padilla, quien ha sido un incansable promotor del deporte de Pala que ciertamente fue fundado en México en 1969, en el bello puerto de Acapulco.
El éxito del Padel en países como España, Brasil, Argentina Venezuela, Senegal, Japón, China, Suecia, Finlandia, Australia y muchos más repartidos en los cinco continentes obedece a que es incluyente porque es fácil de dominar.
La cancha de Santa Anita es profesional, esto hace posible que un aficionado pueda disfrutar de una batalla del más alto nivel sentado cómodamente en cualquier parte y además para el jugador es muy motivante el saber que las condiciones son inmejorables.
Padilla, quien es un empresario sencillo y comprometido con el Club Santa Anita, tiene más que claro que el Padel está creciendo y por ello gozo de las autoridades de su entorno que han visto con buenos ojos su crecimiento.