La baja producción de tenistas de elite en México, aunado a la eliminación de Rodrigo Pacheco hace suponer que pasarán décadas antes de que un mexicano pueda aspirar al cetro de Wimbledon en singles y dobles.

Pacheco, al ser segundo en a siembra y por haber ganado Roland Garros en dobles, fue un serio candidato para sumar su nombre al de Leo Lavalle campeón singles 1985 o de Eduardo Vélez monarca en 1986. También por cualidades pudo igualar a Agustín Moreno como monarca de dobles en Wimbledon.

Pacheco sin duda tiene el tenis o más de Leo y Eduardo en esta etapa, por ende, ya vendrán más torneos y seguramente seguirá dando mucho de que hablar porque es un tenista diferente con cualidades excepcionales.

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