Divide y vencerás o dividir para reinar.
Ganar y mantener el poder mediante la ruptura en piezas de las concentraciones más grandes, que tienen individualmente menos energía.
El concepto se refiere a una estrategia que rompe las estructuras de poder existentes y evita la vinculación de los grupos de poder más pequeños.
Podría ser utilizada en todos los ámbitos en los que, para obtener un mejor resultado, es en primer lugar necesario o ventajoso romper o dividir lo que se opone a la solución o a un determinado problema inicial.
TENIS MEXICANO UNIDO
Al concluir la pasada administración de la FMT el tenis mexicano experimento el rompimiento más grave de su historia. Y todo porque dos directivos tuvieron diferencias logrando involucrar a seguidores que en su mayoría gente de buena fe no tuvo la menor idea del por qué se metieron a una riña de pandemia que seguramente les ayudo para mantenerse distraídos y aferrarse a lo que pensaron que era lo correcto.
El resultado ha sido claro. Por un lado, existe una gobernanza apoyada por los órganos internacionales que ponen la actividad más atractiva y por el otro un poder soportado por institución gubernamental.
El resultado como quiera verse es desastroso porque al no darse entendimiento se dividen los beneficios.
Pero dejemos a un lado el pensamiento patriótico o ignorante de aquellos que manejan una asociación para exponer la verdadera problemática que no ha sido atendida y tiene que ver con el hecho de que el supuesto activo más importante del tenis mexicano es un Centro Tenístico que se encuentra en manos desconocidas y que al no haber sido utilizado adecuadamente no brinda el servicio para el que fue concebido.
Otro factor que le está pegando fuerte al tenis es la perdida de canchas en clubes importantes como el Britania Zavaleta de Puebla, el cual a partir de finales de la década de los años ochenta sonó fuerte por el impacto que causó el campeonato nacional con duelos históricos protagonizados por Luis Herrera contra Agustín Moreno y Pancho Maciel.
Y más adelante por la aparición de un challenger que le dio vida a Puebla y que hizo posible años después que el Zavaleta fuera sede de serie de Copa Davis. Son varios los clubes que ya sacrifican canchas de tenis y ahí no le vemos garra a los directivos que luchan por los intereses de individuos que al final de cuentas forman parte de la inspiración de Maquiavelo bajo una frase corta, pero efectiva: divide y vencerás.
Otro punto que se debe de atacar es la cantidad tan reducida que existe de tenistas de competencia. Un país como México de 120 millones de habitantes cuenta con poco más de tres mil guerreros dentro del ámbito infantil y juvenil. Incluso si esta cantidad llegara a 20 mil sería poco.
Sin duda hay mucho trabajo que hacer y la dirección del sistema debe enfocarse a la recolección de un mayor número de tenistas en cada estado.