Uno de los personajes más importantes del 2022 es el regiomontano Marco Marín porque se dio a la tarea de reactivar el tenis de competencia en Nuevo León con justas avaladas por la Federación Mexicana de Tenis.
A directivos como Marín que hacen un gran esfuerzo para generar competencia en un ´ámbito ADVERSO se les debe de tomar como ejemplo por aquellos que llegan a un cargo y en lugar de buscar fórmulas para mejorar su entorno se la pasan haciendo grilla barata o se aprovechan de su cargo para el manejo de situaciones que dejan mucho que desear.
Pocos ya se acuerdan que los infantes regiomontanos para estar en el círculo de la FMT se la pasaron compitiendo en estados vecinos porque en el terreno de los directivos no se dio un entendimiento en una guerra de poder que no dejó nada bueno.
Marín logró abrir clubes importantes en el inicio con el apoyo del gemelo Garza. Volvió a poner en el mapa internacional a Nuevo León con justas ITF y lo más importantes hizo posible contar con sedes de justas oficiales de la FMT generando un gran ahorro a los padres que apoyan a sus hijos para que posean un ranking nacional.
Por lo aquí expuesto en una época en la que impera la mitomanía sumada al egoísmo de aquellos que ven mal que se resalte al que trabaja nos ponemos de pie y aplaudimos la labor de Marín. Ojalá que el presidente de la FMT, Carlos González y Luis Flores le den el valor que merece la actuación de Marín, quien tuvo que enfrentar fuertes vientos de resistencia para poner en marcha una actividad necesaria en el estado de mayor poder económico del norte y posiblemente de México.