Javier Romero hombre sencillo de pocas palabras, pero con una visión que llama la atención puso la mira en Puerto Vallarta para la promoción de ese destino turístico a través de un challenger que ya vivió su primera edición en 2017.
Romero ya prepara todo para la segunda versión con una política interesante porque su intención se unifica a todos los que pretenden que el tenis mexicano mejore.