Lo difícil no es colocar un torneo en el calendario mundial sino sostenerlo. El promotor Alejandro Burillo ha logrado sostener al Abierto Mexicano contra viento y marea, superando devaluaciones, crisis financieras y muchas adversidades que solo él puede relatar.
El tenis mexicano debe honrarlo con un homenaje porque es el empresario deportivo que más le ha apostado al tenis como deporte espectáculo teniendo en diferentes épocas personas visionarias que lo apoyaron en este duro tránsito.
Ahora Burillo pasa a la historia del deporte mundial al ser parte de una problemática que tiene en capilla a la humanidad y no se raja. El Abierto Mexicano seguirá vigente en el calendario y eso por lo menos este año lo podrá evitar, ni siquiera el Coronavirus.
Grande, grande, grande… Alejandro Burillo.