POR ALEJANDRO ÁLVAREZ ZENITH
Cuando recuerdo los comienzos de Rodrigo Pacheco tengo muy claro su potencial, es decir, talento, habilidad y combatividad, factores que lo han llevado a la conquista de nueve torneos ITF, siendo el último el que se llevó a cabo en el Guadalajara Country Club.
Pacheco venció en la final a un guerrero argentino que puso el alma para salir monarca, pero no lo pudo lograr, nos referimos al argentino Lautaro Midon [2], quien luego de haber escuchado al juez de silla decretar el juego set y partido con score final de 2-6, 7-5, 6-1 se revolcó de dolor al ser atendido por el cuerpo técnico a causa de un desgaste de una batalla de tenis.
Pacheco fue apoyado por aficionados que colmaron las gradas de la cancha principal dando pie a un evento que crecerá y que se convertirá como una cara bonita del tenis mexicano recordando lo que fue durante seis años el Abierto Juvenil Mexicano que se realizó con excelencia en el Centro Deportivo Chapulepec por el gran trabajo realizado por Jorge Noriega y empleados.
El yucateco hoy en día es el mejor juvenil de México en su segundo año de 16 y el hecho de que tenga un lugar en la previa del US OPEN es una oportunidad para ratificar el momento por el que pasa. Pero aún no se ha oficializado su intervención en la justa neoyorquina y tocaremos el tema cuando reaparezca.
Fue emocionante ver a su madre disfrutar un día inolvidable y ver el momento en el que ese noble chamaco le dio un beso que fue lo que nos llevó al inicio de esta nota y que tuvo su origen en el Club La Asunción cuando fue premiado en un nacional de 12 años teniendo solo 10.
Luego de haber bajado el telón en el Guadalajara Country Club no resta más que agradecer la labor realizada por el mago Norberto Mantiñan y una bella mujer que le dio colorido al evento y que es la señora Alejandra Martínez, quien navega en la órbita de jaliscienses especiales que tienen la cualidad de hacer tenis, siendo referentes Gustavo Santoscoy y el mismísimo Rey Juan primero.