Cada vez que tuvimos la oportunidad de cubrir el Abierto Mexicano de Tenis en Acapulco encontramos en Rubén Herrera Carreto una mano amiga. Un compañero de trabajo muy animoso que motivo al acapulqueño a través del diario El Sol de Acapulco a presenciar el mejor tenis del mundo.
Carreto como le decia de cariño falleció el sábado a las 430 am, ese mismo día el 20 de noviembre recibiría el premio al cronista deportivo del año y por azares del destino no alcanzó a recibirlo.
El compañero Héctor Briseño Arriaga fue quien nos dio esta penosa y dolorosa noticia. Descanse en paz.