GOLPE DE REVÉS
ALEJANDRO ÁLVAREZ ZENITH
El WTA de Monterrey es un ejemplo para el circuito mundial de torneos porque su estructura y organización es ejemplar.
Es el torneo dedicado a la mujer y cuando transitas por el Club Sonoma, sede de la justa, te das cuenta que se pensó en todos los detalles y servicios para jugadoras, aficionados, prestadores de servicios y medios de comunicación.
El área de prensa encabezada por el señor Vélez brinda todas las facilidades para que el reportero pueda trabajar con comodidad. Incluso se montó una sala de prensa funcional porque está muy cerca a la sala de jugadoras.
Es cierto que el torneo es elitista y que bueno porque el tenis lo que necesita es acercar a gente con dinero que invierta y que al paso del tiempo se fije en jugadores porque en Monterrey hay mucho talento, tan es así que hay como siete jugadores involucrados en la gran final del Campeonato Nacional, lo cual no deja de ser sorprendente.
Y en la raqueta de la jugadora Andrea Villarreal ya hay una jugadora luchando en el circuito profesional como lo hizo en su momento Daniel Garza, quien en su etapa de juvenil ganó un future en el Club Berimbau, más adelante fue uno de México y representó a México en Copa Davis.
La llegada de Giuliana Olmos a la gran final de la X edición le dio un toque mágico a la jornada final y seguramente los puntos que adquirió le serán de gran valía para crecer en el tour.
Por todo lo expuesto sólo nos resta agradecer las atenciones que recibimos de parte del señor Vélez y equipo de trabajo, así como a los choferes que brindaron el servicio de transportación.