Concluyó la Olimpiada Nacional y solo resta agradecer el apoyo del director del torneo Hugo Castillo por estar al pendiente de las necesidades de medios de comunicación.
Cada vez que requerimos resultados estuvo abierto con llamadas o wap, lo cual se agradece. Lo mismo se puede decir de Miguel Bravo, a quien buscamos este día para poner los resultados al momento y muy gentilmente al no hacer contacto en el primer intento devolvió la llamada.
Un gañan se hubiera hecho el occiso o hacerse de la vista gorda. Al final del día gente como ellos que ganan dinero por apoyar el desarrollo de un torneo deben manejarse con vocación de servicio, sobre todo en una época en la que hay demanda de trabajo y poca oferta con la caída del circuito profesional.