La mazatleca Giuliana Olmos y la estadounidense Desirae Krawczyk contra todos los pronósticos accedieron a la gran final del WTA Monterrey que se protagoniza en las instalaciones del Club Sonoma.
Olmos y Krawczyk se impusieron en batalla dramática a las rusas Valeria Savinykh y Yana Sizikova por 5-7, 7-6 (4) y 10-1, teniendo de escenario la cancha uno.
El servicio no lo pudo sostener Giuliana y eso fue determinante para que perdieran el primer set. En el segundo las acciones se mantuvieron muy parejas hasta llegar al game de desempate. La dupla mexicoamericana sacó la garra y sin miramientos concretaron el 7-4 y se llevaron las palmas.
Olmos pidió ir al baño y a su regreso conjuntamente con Krawczyk tuvieron un dominio absoluto al grado de que solo perdieron un tanto. Todo fue muy rápido, pero los aficionados presentes lo disfrutaron en grande a sabiendas de que en esta justa nadie de origen mexicano había llegado a una final y más que esta proeza se dio en el décimo aniversario.