Se deben revivir las historias de éxito para que los infantiles mexicanos desarrollen una mentalidad ganadora.
Muchos de los fracasos que se han dado se deben a la mala dirección en la preparación y selección de equipos nacionales.
Oliver Fernández, fue un gran juvenil mexicano que protagonizó finales de justas como el Orange Bowl, Internacional de Italia y Bélgica, fue campeón de la Copa Casablanca, etc.