Al hablar de potencia en el deporte, vienen a la mente imágenes de los ídolos deportivos  haciendo una jugada espectacular y de alta dificultad como las “Clavadas” del  basquetbol,  o un  súper tiro  en el caso del soccer.

En el tenis  podemos recordar a Rafael Nadal corriendo de un lado al otro de la cancha y hacer un passing shot magistral,  y muchas personas tienen  la creencia  de que estas acciones dependen en su totalidad de un factor actitudinal y motivacional.

Aunque es cierto que el valor, coraje y la habilidad son componentes muy importantes para conseguir esos resultados,  desde un punto de vista objetivo  estas características solo influyen en  esos logros,  ya que el factor  determinante será el tipo de entrenamiento al que se ha sometido el atleta.

Es necesario dejar en claro que la duración y calidad de una o varias acción de alta intensidad es directamente proporcional al trabajo de “Fuerza, resistencia y coordinación intra-inter muscular realizado en la etapa anterior.

Varios autores definen a la Potencia como la capacidad de realizar una o varias acciones en el menor tiempo posible y con la máxima manifestación de fuerza.

Ahora bien, para desarrollar esta capacidad es necesario contar con una base amplia de fuerza y coordinación ya que estas dos son  las mas  condicionantes de la potencia, pero es aquí donde  muchos entrenadores se  desvían un poco del objetivo o les cuesta trabajo entender como llevarlo acabo durante las sesiones.

Existen entrenadores que por el afan de conseguir mejores resultados a corto plazo hacen uso desmesurado dentro y fuera de  la cancha de ejercicios que implican  pliometria, balísticos y exhaustivas sesiones de golpeo con desplazamiento.

Esto es por que algunos entrenadores y atletas temen hacer trabajo de fuerza y de coordinación por mitos como el “volverse lentos” o “perder el tiempo” si es que no realizan  todos los ejercicios hasta la muerte corriendo y golpeando la bola como desesperados.

Con una correcta asesoría es posible realizar una  planificación donde se le asigne un tiempo adecuado al desarrollo de la fuerza y la coordinación, dosificando las cargas en relación a los objetivos, para eso lo mas aconsejable es  documentarse acerca del tema y trabajar con estricto apego ala metodología deportiva.