Dentro de la generación de 12 y menores detectamos a Antonella Marín, a quien le costó adaptarse a la arcilla al ser jugadora de cancha dura, pero lo importante es que apareció en la ceremonia de premiación al llevarse el dobles.
El Comité de Menores de la FMT debe informar a la mayor brevedad cual es el mapa que tiene para desarrollar un tránsito efectivo en pro de las promesas. Debe haber personas maduras que estén adelantadas al proceso que sigue Antonella y esto servirá para mejorar las condiciones de un futuro tenístico. Vamos y pónganse a trabajar en lugar de hacerse los importantes en grupos de poder.