Miguel Gallardo, oriundo de Chihuahua y formado por Fernando Ochoa en Monterrey en su etapa de jugador fue disciplinado y entregado.
Para que tengan una idea más clara de lo que decimos es de los que forzó el motor más de la cuenta y como cuate se puede decir que es buena persona. Por lo menos así lo definimos por las oportunidades que hemos tenido de convivencia con él al calor de justas por naciones y torneos ATP.
Del baúl de los recuerdos ponemos una gráfica con nuestro amigo don Gastón Villegas Serralta.
