En el 2010 el austriaco Dominic Thiem, quien se presume que será el heredero de Rafael Nadal y Roger Federer cuando estos colosos sean vencidos por el tiempo pasó sin pena ni gloria en la Copa Internacional Casablanca.
En esa justa enfrentó al mexicano Rodrigo Ortega a quien venció por 6-2, 6-4 en lo que fue un match entretenido.
Uno año después conquistó la Copa Yucatán a nivel del mar superando al mexicano Lucas Gómez por 6-2, 6-2 en la segunda ronda.
Este austriaco también ya fue monarca del Abierto Mexicano venciendo al bosnio Damir Dzumhur. Quien iba a decir que este jugador de 1.80 de estatura ya este en la final del Roland Garros, luego de haber pasado por dos semifinales.
Es el segundo austriaco que logra esta proeza, pues anteriormente lo hizo Thomas Muster, quien también fue campeón del Abierto Mexicano de 1993 a 1996. Dominique superó a Marco Cecchinato por 7-5, 7-6 (12-10) y 6-1.
Vale decir que el jovencito llega mermado de la pierna. Y con rostro contento reconoció que el segundo set fue muy duro «que bueno que gane el tercero, no quería jugar más. Mantendré mi buen nivel y dare todo el domingo».